Patxi López apuntala en el Comité su aspiración de liderar el PSOE
El Comité Federal de este domingo ha servido para confirmar dos cosas: una, ratificar- cero sorpresas- la abstención al PP. La otra, reavivar las apuestas que colocan a Patxi López en la carrera por el liderar el socialismo.
No son pocos los que han visto en la intervención del exlehendakari el aperitivo a su candidatura para las primarias que, aún sin fecha, habrán de renovar la dirección socialista. López aprovechó su turno para erigirse en voz del ‘no’ a Rajoy y apoyó su alegato en frases de épica. «No compremos un respiro momentáneo al precio de ahogarnos para el futuro”, fue una de ellas.
Desde la dimisión de Pedro Sánchez, el expresidente del Congreso se ha reivindicado como una de las voces más críticas contra la actual gestora. Incluso más que aquellos que en su día fueron fieles consejeros del depuesto líder, como César Luena, quien se limitó este domingo a lamentar, en tono dramático, el resultado de la votación.
En las últimas semanas, López ha tratado de mantenerse alejado del debate, y, sobre todo, de reproches y acusaciones entre uno y otro bando. El exlehendakari fue ya rotundo cuando, tras el convulso Comité del 1 de octubre, apeló a la «serenidad» para reconstruir el PSOE. «Los socialistas nos volveremos a levantar una y mil veces», dijo, en un gesto de reconciliación. Ello, sin diluir la postura del ‘no’ a Rajoy, que le ha hecho ganarse el favor de la militancia.
La vía López genera sin embargo amplios recelos entre quienes no cierran aún la posibilidad de que Pedro Sánchez acabe presentando su candidatura. El cada vez más mermado círculo ‘pedrista’ teme además que el tiempo juegue en su contra si la gestora logra aplazar lo suficiente la convocatoria de primarias. Ausente de la primera línea política- desde su dimisión no ha participado en las reuniones del grupo parlamentario, ni siquiera en los plenos en el Congreso- Sánchez podría caer en un prematuro olvido de cara a los procesos internos del partido.
‘Operación López’
La ‘operación López’, como ya se ha dado en llamar en medios internos, cuenta además con el aval de la vieja guardia socialista, y de dos ‘pedristas’ como Óscar López y el portavoz en el Congreso, Antonio Hernando. Ambos, de hecho, intentaron ya promover a López en las horas más bajas de Rubalcaba como secretario general, aunque desistieron y se plegaron a la llegada de Pedro Sánchez a Ferraz.
Los rumores que apuntan a López no son recientes, aunque sí cobran un nuevo sentido dadas las actuales circunstancias. Incluso antes de que Sánchez dimitiese al ver truncadas sus intenciones de adelantar el congreso, la maquinaria interna para aupar al exlehendakari ya estaba engrasada.
Ya en 2013, el propio López sugirió estar dispuesto a dar el paso a la primera línea del PSOE nacional con un enigmático “yo nunca me suelo poner de perfil cuando hay cuestiones de este tipo”, en referencia a las primarias que su partido celebró un año después.
Los críticos con López dudan, en cambio, de que su pasado en la gestión del PSE sea lo más conveniente para un partido que debe revitalizar sus resultados electorales. Recuerdan que fue en el País Vasco donde el partido anotó sus peores resultados- tres escaños el pasado 26-J y en caída permanente- dentro de la debacle de los 85 diputados.
Ferraz debe convocar en los próximos meses el congreso que los socialistas tenían que celebrar los días 21 y 22 de mayo y que la dirección dejó en suspenso “hasta la formación de Gobierno” para contener las disputas internas si Susana Díaz decidía al fin presentarse como alternativa.